Entrada la noche de ayer, pude ver no sin asombro y un poco de (tal vez) espanto como en medio de la globalización infinita, conviven y resisten también, las mas viejas y profundas tradiciones de un pasado regional - autóctono (se suele decir).
Estos renegados son puros, no conocen de contracultura, que es un concepto con una fuerte impronta ideológica.
La historia los castiga, pero ambos (globalizados y detenidos en el tiempo) son inocentes portadores de su naturaleza.
11.1.11
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario