En medio de un regreso a ciertas reflexiones
hedonistas, que se alejan del ruido mundano donde las dispersiones gobiernan el
quehacer, pensaba en comprar un jardín o tal vez un huerto, a la manera de
Epicuro y retirarme a pensar en paz.
Es gracioso, uno “googlea en imágenes” la
palabra hedonismo y las fotos que aparecen tienen directa relación con los
excesos, con el gobierno de lo salvaje, ¿será que el concepto está impregnado
de la moral cristiana que ha erosionado la otredad siglo tras siglo y de la ética
protestante que redobló la apuesta con arreglo a fines productivos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario