Consideramos al hombre (es decir a nosotros mismos) como una unidad integral, la pregunta ronda sobre: ¿si el plano afectivo es metafísico? – viéndolo como un aspecto puramente inmaterial, imposible de ser verificado empíricamente y con retazos de idealismo, subjetividad ciento por ciento y aspiraciones superiores expansivas. En ese caso, ¿podemos pensarnos como existencia sin mas? - La respuesta sigue girando, aún lejos de nuestra existencia finita.

Por otro lado podemos decir que es producto del devenir, como apertura, expansión.

En todo caso siempre es posible una nueva significación acerca de nosotros mismos y nuestro quehacer conflictivo y conflictuado.

La realidad es una categoría con valor asignable, donde se clasifica el acontecer.